En un partido que más bien fue una necesidad para ambos equipos, los Gallos de Querétaro se alzaron con la victoria en una jornada que apenas puede aspirar a ser recordada por su intensidad y drama. La Franja del Puebla visitó el Estadio Corregidora, donde los locales intentaron escapar de la «zona de multas» que les amenazaba en caso de no lograr algún tipo de resultado positivo.
Para los aficionados a los Gallos, la motivación para ganar era doble. No solo se trataba de mantener la ilusión de evitar la peor posición en la tabla general, sino también de evitar pagar una sanción económica que podría llegar a 80 millones de pesos si el equipo terminaba en uno de los últimos tres lugares del certamen. La ansiedad y el nerviosismo estaban palpables en el ambiente, como si la mismísima seguridad financiera dependiera de un resultado favorable.
La Franja del Puebla, por su parte, llegó al partido con el objetivo de ganar y mantener su distancia respecto a los otros equipos peleando por evitar la zona de multas. Sin embargo, su juego no encontró el equilibrio necesario para vencer a un equipo como los Gallos, que tienen una base de aficionados férrea y un estilo de juego más completo.
La primera parte del partido se caracterizó por la falta de claridad en ambos campos. Los jugadores se parecían más a sotaneros que a profesionales, intentando controlar el balón sin demasiada convicción ni coordinación. La oportunidad de crear algo verdaderamente peligroso fue escasa, y los porteros de ambos equipos apenas tuvieron que hacer un par de interveniciones.
La segunda mitad del partido mostró un poco más de intensidad, pero no cambio significativamente el panorama general. Los Gallos lograron encontrar algunas oportunidades de gol, aunque su juego no fue tan convincente como para decir que dominaban el partido. La Franja del Puebla intentó responder con algunos ataques, pero su capacidad para crear peligro era muy limitada.
Fue en los minutos finales cuando los Gallos encontraron la inspiración necesaria para conquistar el resultado. Un gol en un contraataque rápido y hábil permitió a Benjamín Mora celebrar con su equipo, lo que les dio un respiro importante en su lucha por evitar la zona de multas.
En este sentido, la victoria de los Gallos puede verse como un alivio más que una celebración. Es cierto que el juego no fue impresionante, pero el resultado es todo lo que importa para un equipo que está luchando por mantener su dignidad en el torneo. La Franja del Puebla, por otro lado, tendrá que refinar su juego y encontrar la manera de generar oportunidades de gol si quiere evitar la peor posición en la tabla general.
En cualquier caso, el partido no fue un ejemplo a seguir para los aficionados al fútbol. Sin embargo, para los Gallos, es un resultado valioso que les permitirá relajarse un poco y enfocarse en mejorar su juego en los partidos futuros.